¿Cuáles son las mejores caravanas?

Cuando se habla de comprar una caravana hay en el mercado muchas opciones entre las que escoger. Existen marcas de vehículos que también fabrican caravanas y existen marcas caravanas especializadas tan solo en ellas. Los expertos recomiendan estas últimas ya que, al trabajar exclusivamente este tipo de vehículos, tienen en cuenta todos los detalles y trabajan mucho mejor las características principales y también los detalles secundarios de las mismas.

Una vez que tenemos claro que las marcas especializadas pueden darnos un plus de calidad, nos queda escoger el tipo de caravana que queremos y para eso hay que tener en cuenta, en primer lugar, la cantidad de personas que van a usarla de manera habitual y continuada. Hacemos especial énfasis en que sea habitual y continuada, ya que si la caravana es para que viajen los padres con los hijos y de manera esporádica acompañen a los niños unos primos o amigos, estos no pueden contarse a la hora de elegir.

Para dos personas, las mejores caravanas son las de un único espacio, aunque se puede optar por las de dos zonas para no tener que transformar el espacio de día en espacio de noche. De esta manera, se tendría una zona de noche, en la que estaría la cama y un espacio de día, con el área de cocina y comedor. Si se tienen niños, los dos espacios son lo mínimo que se necesita, ya que habrá que acomodar a toda la familia. Pero si el presupuesto lo permite, se puede comprar un vehículo con tres zonas para que los pequeños tengan su cuarto por un lado, los padres por otro y la zona central sea un lugar para uso durante el día o para acomodar en caso de tener invitados.

Tras esto, habrá que elegir los servicios de los que se quiere disponer en la caravana. Las mejores son las que cuentan con un baño completo y amplio y una zona de cocina. Pero puede ahorrarse esta última contando con una cocina exterior que se monte en el lugar en el que se va a pasar el día o la noche. Esto es ideal cuando la caravana se utiliza para ir a un camping pero puede ser incómodo si se cambia de lugar cada día ya que habría que montar y desmontar el anexo.